Los madrileños Miss Baker se presentan al mundo con #1, un compendio con siete pistas diferenciadas de duración desigual. El trío produce las canciones bajo la dirección técnica y artística del guitarrista y vocalista Aitor Uribarri.
Su música pasa por el rock grunge con ramalazos stoner y costuras derivadas de la música alternativa en este sentido. La dupla de guitarra y bajo pesados va marcando el ritmo, con la batería quedando en un discreto segundo plano.
Las letras escupidas por Uribarri se impregnan de decepción con la realidad social y política de nuestros días. Canta desde un pedestal impersonal, frío aunque se ataca con melodías rock bien construídas. En este sentido el músico puede innovar de cara a futuras referencias.
Canciones como El fuego y la furia rompen la dinámica general del disco, en este caso con una composición minimalista, a medio tiempo y centrada en los arreglos de post-producción; prueba de que Miss Baker no se encierra en una tónica unitaria la hora de entrar a grabar en estudio.
El propio grupo se califica como referencia de rock espacial, si bien algunas de las características definitorias del estilo no se encuentran presentes o van y vienen según el caso. Los de Madrid defienden su criatura mejor en cuanto a sonoridad y composición que a la hora de conformar mensajes verbales.
Echamos en falta algo de riesgo por momentos, mayor capacidad de sorpresa en un álbum que se encierra demasiado. En cualquier caso #1 supone un primer intento aceptable que llega a disfrutarse, un trabajo prometedor de cara al futuro de la banda.