Nos sumergimos en un mar de electro-purpurina con Espejos y Diamantes y su debut homónimo. Los miembros de Carrero Bianco Carlota y Joaquín nos traen junto a Ferror Records diez pistas cargadas de pop sintético melódico y voces robóticas y frías. Toman estructuras propias del estilo y firman canciones diversas, algunas más contundentes a la caja y otras menos estridentes. Huyen con acierto del exceso en beneficio de velocidades moderadas.
Las letras tiran de sátira, tabúes y fiestas nocturnas, escapan a cualquier profundidad notable y cumplen su función, con continuadas referencias a la cultura pop internacional y nacional del siglo pasado. Espejos y Diamantes entrega lo que su nombre promete, si bien no veo cómo se puede evolucionar desde el cliché y algunos lugares comunes sin apostar por vías diversificadas. Las labores vocales compartidas entre géneros suelen sumar al conjunto, y aquí no vemos excepción.